te digo adiós con el corazón,
pero no me pidas que me perdone,
pues cuando te fuiste,
no estaba yo.
La noche se tono ocre,
y el cielo se enrojeció.
Al despedirte de este mundo
y no poder estar yo .
espero algún día me puedas perdonar
y estar en ese mundo de libertad,
llore lágrimas una eternidad,
pero no fueron tantas.
Para poderme quitar ,
esa espina que tengo clavada .
Y esta es la despedida,
que no te pude dar.
11 - 2010
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